La tarima que rodea la piscina, en un juego de doble acabado, focaliza la visión de la pérgola como un remate elevado sobre el agua.



En Valencia los meses de clima templado se prolongan hasta casi cubrir la mitad del año. Desde abril a octubre,…
En Valencia los meses de clima templado se prolongan hasta casi cubrir la mitad del año. Desde abril a octubre, especialmente en días soleados, se puede disfrutar de momentos de ocio y diversión al aire libre. Los propietarios de esta vivienda unifamiliar querían incorporar en el jardín, junto a la piscina, un punto de estar fresco, agradable y en sombra, en el que hacer vida familiar y social aprovechando el entorno natural y distendido.
Nos pareció interesante diseñar una estructura ligera que descansara sobre la superficie firme del jardín pero que invadiera un pequeño margen de la piscina, generando la sensación de vuelo sobre el agua, especialmente agradable para los meses más calurosos. Se planteó además con un sistema de cierre y apertura muy versátil, de manera que fuera posible tener el espacio completamente ventilado incluso por la cubierta, o bien cerrado y protegido.
Como solución visual de enmarcación de la pérgola en el conjunto del jardín y la piscina se proyectó una superficie de madera IPE que, a modo de tarima cálida sobre el césped, va marcando el camino hacia la pérgola a la vez que sugiere una composición geométrica capaz de integrar todo el conjunto entre los límites de vegetación de la parcela.
La tarima que rodea la piscina, en un juego de doble acabado, focaliza la visión de la pérgola como un remate elevado sobre el agua.