

Este encargo llevaba implícitos dos retos importantes: Desde el punto de vista constructivo debíamos ejecutar nuestro edificio aprovechando los muros…
Este encargo llevaba implícitos dos retos importantes:
Desde el punto de vista constructivo debíamos ejecutar nuestro edificio aprovechando los muros pantalla del sótano del edificio original, que coincidían con el perímetro de la parcela.
Desde el punto de vista proyectual debíamos diseñar un edificio sin uso específico, sacando el máximo aprovechamiento a una parcela de superficie muy irregular.
De acuerdo a la normativa urbanística vigente, el máximo aprovechamiento del solar se conseguía distribuyendo el edifico en tres plantas (semisótano, planta baja y planta primera), además de las plantas de sótano para el garaje. A partir de aquí había que decidir si el acceso se situaba en planta baja o planta semisótano, siendo esta última la opción elegida ya que permitía una entrada más amplia y visible desde la calle a la vez que potenciaba la entrada de luz natural. El acceso se sitúa en el quiebro de la fachada del edificio.
La dificultad constructiva estribaba en mantener el muro pantalla del edificio anterior sin aprovechar ninguno de los forjados existentes, ya que las nuevas cotas de planta no coincidían. Además, en el caso del sótano hubo que excavar casi 3 m. por debajo del nivel existente, lo que implicaba situarse por debajo del nivel freático y por debajo de la cota de los sótanos colindantes. Para la ejecución del nuevo muro pantalla en las paredes medianeras hubo que utilizar una pantalla de jet grouting que permitiese consolidar el terreno por debajo de los edificios, mientras que en la parte recayente a calle bastó con realizar una excavación por bataches previo apuntalamiento del propio muro con perfilería metálica.
A partir de esta estructura debíamos proyectar un edificio polivalente que pudiese albergar desde uno a ocho inquilinos. Por ello planteamos las plantas como espacios diáfanos, de gran versatilidad, ocupados únicamente por el núcleo de comunicación vertical y una zona de aseos en las plantas baja y primera.
La fachada se caracteriza por su limpieza formal, únicamente alterada por el cuerpo volado que marca el acceso. Tiene un revestimiento ligero de paneles composite con acabado en aluminio, lo que le otorga un carácter actual e intemporal. La dimensión máxima de estos paneles ha influido en el diseño de la composición de los huecos en fachada, los cuales se han cerrado con carpintería de aluminio anodizado de la casa Technal.
Posteriormente el inquilino del inmueble nos encargó el proyecto de distribución del edificio como nueva sede de la Universidad Europea de Valencia.